viernes, 8 de junio de 2012

Formas que encajan

Tuercas y tornillos; llaves y cerraduras; piezas de puzles; cajones y cajoneras; personas y personas, o sea parejas. ¿Qué tienen todas estos pares de objetos y humanos en común? Que, para que funcionen, tienen que encajar. 
El pasado día de San Valentín, compré en Lidl (es que soy muy fan de Lidl, proque vende cosas variopintas pero muy chulas y útiles... Voy a tener que hacer un post de Lidl) una taza para hacer un regalito gracioso. Puede parecer un poco cursi (a mi chico se lo pareció, la verdad, y en previsión de ello también le regalé una tarjeta super molona de la que ya os hablé aquí) pero es uno de esos objetos que me recuerdan cosas importantes. Me recuerdan que las personas que celebramos juntos días de San Valentín año tras año, podemos hacerlo porque encajamos. Las parejas que funcionan, algunas veces, lo tienen todo en común. Pero sinceramente no creo que de esas haya muchas. La mayoría de las parejas que funcionan, son parejas que se complementan. A mí no me interesan las mismas cosas que a mi pareja, pero él ha sabido hacer que a lo largo de estos años me aprenda los nombres de muchos futbolistas, me interesen los deportes de riesgo (aunque por ahora no los practique), entienda cómo funcionan algunas nuevas tecnologías que antes me parecía que funcionaban por magia potagia, y también ha conseguido que no le dé tanta importancia a lo que no la tiene. Por mi parte, yo creo que he conseguido que él vea algunas exposiciones con curiosidad, que le interese cómo funciona una cámara de fotos, que se recorra las ciudades que no conoce como si no hubiera un mañana (aunque a lo mejor eso ya lo hacía de antes), que perciba detalles que antes le pasaban inadvertidos, y que sea menos práctico y más soñador con algunas cosas.

Por eso encajamos: porque somos diferentes, aunque en lo fundamental somos parecidos. Quiero decir: los dos somos tazas. Si fuéramos tuerca y tornillo, seríamos metálicos. Si fuéramos cajón y cajonera, seríamos de madera. Hay personas que nunca podrán encajar, porque no tienen en común su escala de prioridades y valores en la vida. Y eso es tan difícil como abrir una cerradura con un mortero: seguro que nos empeñamos en que tiene que funcionar, y al final no lo conseguimos, y encima alguien se hace daño. Kukuxumusu lo ilustró con este dibujo tan expresivo.
 

Yo he hecho unas fotos a mi taza, sacándola de la cocina, con la ciudad de Madrid de fondo. Fuera de su alacena, las tazas cobran vida, y se parecen un poco a nosotros mismos. 


Formas que encajan. Naiara Briones
"Formas que encajan"


Formas que encajan. Naiara Briones
"Formas que encajan"

Igual que este salero y pimentero de la marca de diseño francesa Pylones, que sabéis (porque también os lo conté aquí, que me encanta). Sal y pimienta, aceite y vinagre, curvo y convexo. Formas que encajan. Personas que encajan. Relaciones que funcionan. Puertas que se abren. Vidas más felices.


"Formas que encajan" Naiara Briones
"Formas que encajan"
"Formas que encajan" Naiara Briones
"Formas que encajan"
A lo largo e los años, supongo que las formas de las personas van cambiando por diversos motivos. Las circunstancias nos pedirán que adaptemos nuestra forma a la de nuestro compañero, para poder seguir encajando. Así que mi reflexión es que encajar hoy es importante, pero no definitivo. Evolucionar, estando pendiente siempre de nuestra pareja, de sus necesidades, de su manera de afrontar la vida, y adaptarnos a ello es el secreto de las relaciones que funcionan en el tiempo. Claro que las formas tienen que adaptarse mutuamente la una a la otra, y comunicarse mientras todas estas transformaciones ocurren. 

Mañana se casa una maravillosa persona, muy querida por mi familia. Le deseo todo lo mejor de corazón.  A Marivi y Luis, con todo mi cariño y mis mejores deseos. Espero que seais formas que encajen siempre.


2 comentarios:

The Cynnamon Queen dijo...

Que razón tienes!!! más que un santo!! que diría mi madre.

Efectivamente pienso igual que tu, que las relaciones son un sistema de acople al 100%. Un tema de cintura, de respeto y de adaptación. De que cada uno saque y haga suyo lo mejor del otro.

Me ha encantado tu post.

Saludos

...nai... dijo...

:) Muchas gracias, Cynnamon Queen (me encanta el nombre, por cierto). Me alegro que conecte también con tu forma de pensar. Yo lo siento así, y lo pienso muchas veces, por eso me dio el otro día por ponerlo por escrito. Es lo bonito (y lo más difícil) de las relaciones.

Un abrazo!